Para los entusiastas de la guitarra eléctrica que buscan elevar su sonido, los icónicos amplificadores de válvulas Orange OR30 y TH30 han despertado un gran interés por su mezcla de tonos clásicos y características modernas. Tendiendo un puente entre el pasado y el presente, estos amplificadores ofrecen un potente golpe, proporcionando un sonido flexible y potente que ha sido rigurosamente probado por guitarristas de todo el mundo.

En el corazón del atractivo de estos amplificadores se encuentra su gran volumen y espacio para la cabeza. Diseñado y fabricado en el Reino Unido, el OR30 pretende ser uno de los amplificadores de 30 vatios más potentes del mercado. Alcanza niveles de presión sonora comparables a los de una central de 100 vatios, sin comprometer el tono. El TH30 también impresiona por su versatilidad, con un cabezal de inspiración vintage y la capacidad de alternar entre una potencia de 30 vatios que llena la sala y una configuración manejable de 2 vatios, para adaptarse a diversos entornos de interpretación.

Sin embargo, lo que más destaca de ambos modelos es su flexibilidad tonal. Equipados con un pedal de aumento de volumen y un versátil conmutador de brillo, estos amplificadores se adaptan a una amplia paleta sonora. El conmutador Bright de tres vías del OR30 destaca especialmente por su compatibilidad con pedales, lo que permite a los músicos adaptar su tono a la perfección. Del mismo modo, las amplias opciones de ecualización del TH30 garantizan que conseguir el sonido ideal esté siempre al alcance de la mano.

Un elogio frecuente tanto para el OR30 como para el TH30 es la variedad de mandos de control. Permiten una personalización detallada del tono, desde limpios nítidos a saturaciones ricas. El bucle de efectos totalmente de válvulas del OR30 y el bucle de efectos con buffer de válvulas de baja impedancia del TH30 también se destacan como características clave para mantener tonos de pedal nítidos. A menudo se menciona la sólida calidad de construcción de los amplificadores, con una estética de diseño inconfundiblemente Orange.

A pesar de estos brillantes atributos, los usuarios han señalado algunos inconvenientes. Uno de ellos es la falta de innovación del OR30 y la incertidumbre sobre su potencia real, mientras que en el caso del TH30, el bucle de efectos incluido puede ser ruidoso y se nota la ausencia de pedalera. Además, el precio puede influir en algunos, posicionando estos amplificadores en un segmento más premium.

En conclusión, tanto el Orange OR30 como el TH30 son célebres por ofrecer potentes prestaciones y versátiles opciones de control del tono en un paquete de precio razonable. Aunque puede haber algunas áreas de mejora, sus pros eclipsan abrumadoramente a los contras. Con altas calificaciones en todos los ámbitos, estos amplificadores son opciones muy recomendables para los guitarristas que buscan calidad y versatilidad.

• 

  Mitsy Alejandra García Ramírez

• 01.18.2024
• 0